lunes, agosto 01, 2005

Expreso de media noche

Quiero tener el control
En dos minutos logro ser otro y miento a diestra y a siniestra sin dificultad
Como un espejo de circo, como el reflejo en el agua; nada me sirve, el atardecer nunca me salva, la montaña me aturde y la cama me atrapa, solo solo solo

1 Comments:

Anonymous Anónimo said...

Amigo mío, cierto es que la gente con frecuencia se disfraza,y el horror, creo yo, radica en verdad en que así es más fácil ser aceptado, e incluso admirado.. pero al admitir tu propia sumisión olvidaste cierto detalle (fundamental, como todas las cosas pequeñas), y es que justamente que yo cre conocer lo que hay detrás del aparente Nicolás, detrás del dejarse llevar..y lo sé porque yo una vez también usé ese disfraz, y créeme, sé lo que se siente al ocultarse entre el bullicio, conozco la soledad de la incomprensión. Quiero que sepas que no estás solo, porque con similitudes o discrepancias, estamos los que cuestionamos y sospechamos.. no hay verdad capaz de convencernos, pero sí la certeza de que no somos los únicos! Mis saludos afectuosos.. Y te aseguro que huir de la regla general es más un motivo para enorgullecerse que para entristecer (aunque en cierta medida se corra el riesgo de enloquecer)

20 de agosto de 2005, 9:56 a. m.  

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